Eren mitjans d’abril, just acabada
la Setmana Santa de 1975 quan Franco ja portava temps en la seva llarga agonia,
que un tornava a casa amb la blanca després d’haver passat 15 mesos en el
servei militar amb “petits incidents” com la flebitis de Franco, la marxa verda
i una amenaça d’ETA de volar el polvorí just el dia en que a un li tocava guàrdia.
Era el moment de tornar a la rutina
i un va parlar amb el pare per dir-li que volia oficialitzar ja el meu paper de
crític d’art. Abans de la mili, i com que per raons de fina i una salut ja un xic
migrada ell no podia assistir a totes les exposicions, un acudia a unes quantes
, li passava les notes i llavors era ell el que realitzava la literalització de
les mateixes.
Al pare li va semblar bé la meva
proposta i durant uns mesos jo escrivia la crítica que després passava per el
seu sedàs corrector. Algunes ja anaven signades per PIC II, el nom que m’adjudicà
Ricard Navarro, el director del Diari de Mataró, encara que jo preferia PIC DOS.
Així fins que va arribar el Sant
Lluc d’aquell any (1975) i el pare em va dir: Tota teva. I així va ser. Va ser
la meva primera crítica , del tot influenciada per la manera d’escriure i
confegir que tenia el pare. Una crítica però , que una vegada llegida per ell,
va dir, millor que es publiqui una vegada acabada l’exposició. Dintre del que
es pugui, comencem bé.
Una crítica a la que considero el
meu veritable inici com a crític. Un paper que durant quaranta anys he
realitzat a Mataró amb sinceritat i honestedat i que ara arriba al seu final. La
crítica del Sant Lluc de 2015 , quaranta anys i quaranta Sant Lluc ja que entre
mig va existir el buit d’un any . Sant Lluc com inici i final. Sens dubte
millor signe de mataronisme artístic no el podia trobar.
Per això i en espera que d’aquí uns
dies presenti la crítica de l’edició d’enguany , és per a mi un plaer reproduir
aquella crítica que va ser l’inici de tot.
Gràcies de cor per la confiança que
m’heu donat en aquests quaranta anys.
EXPOSICIÓ COL·LECTIVA SANT LLUC
1975.
(Biblioteca Popular. Mataró)
Cuando aparezcan estas líneas, la gran colectiva del Sant Lluc de este año
se habrá clausurado. Pero se ha hecho de esta manera para que el público haya
podido contemplar detenidamente i sin ningún forcejeo como podría parecer la
aparición de los comentarios críticos. Ello no representa en modo alguno una “acción
a posteriori”, muy cómoda por otra parte, sino que se ha hecho, repito, para
que no se hayan interferido los conceptos espectador-crítico, que en esta
ocasión, si bien concordantes en muchos participantes, puede que no lo sean en
algunos que tienen su importancia artística.
Ciertamente no cabe en los límites de una crítica normal, todo lo que
sugiere la presente edición del Sant Lluc, que estupendamente presentado en las
salas de la Biblioteca Popular, con el patrocinio de la Caixa d’Estalvis Laietana,
se ha exhibido para deleite de todos aficionados. I no cabe por cuánto al tratarse
de la mejor edición de los Sant Lluc habidos, se hace imposible mencionar, sin
olvidos irreparables, cuanto hay de categoría en esta exposición. Es por ello
que he creído conveniente la realización de un estudio que , quizás sin ser
exhaustivo, comprenda los diversos aspectos y matices de ésta colectiva.
Estudio que en sucesivas crónicas aparecerá en éstas páginas.
Sirva ésta únicamente como presentación de ésta “ première” de temporada,
que ojalá responda a los deseos que uno se formula, a la vista,
desgraciadamente, de tanta mediocridad, porque, ya es hora de decirlo: el nivel
del Sant Lluc está muy por encima de la tónica dominante de exposiciones vistas
en la temporada pasada. Y no digamos de ls primeros nombres que han aparecido
ya , - salvo honrosas excepciones-, en
las carteleras de la capital.
Si la memoria no me es infiel, fueron cerca de setenta las obras que se
presentaron. Pintura, claro está que en una abrumadora mayoría. Escultura, en
dignísima representación, y Artes Aplicadas ,
en lo que entrañan de interés, porque éste campo no ha sido insistido
aún lo suficiente y ofrece an chas perspectivas. Y todo ello, en un alarde de
composición visual que ofrecía al espectador garantía de que se hallaba ante
una manifestación de las que entran pocas en una temporada. Figuraticos,
abstractos, “ismos” intermedios.., creo que todos se esmeraron en sus obras en
una especie de auto-análisis que ya desearíamos siempre. Y ése ha sido otra de
las razones de posponer el estudio crítico a que la exposición se haya
clausurado. Porque, no solo el espectador, sino el mismo participante, habrá
sentido la necesidad de establecer comparaciones. Uno no duda de que ésta vez
habrá ma´s de un concursante que habrá visto claro su camino., ya hacio lo
ascendente, o bien todo lo contrario. En ambos casos no hay duda de que el arte
habrá salido ganando.
II.- LOS CONSAGRADOS
Observando la temática de todos aquellos artistas que en nuestra ciudad han
alcanzado ya la categoría elitista, debo decir que se ha llevado más de una
decepción por cuanto estamos acostumbradosa juzgar unas obras desde un
imperativo categórico de la calidad que poosee. Y dá la sensación, en más de
una ocasión que concurrir al sant Lluc se hace, no exhibiendo lo mejor de su
obra, sino como una aportación de compañerismo. Repito que ello es debido a que
exigimos más de ellos.
Pasemos brevemente a los análisis individuales. ALCOY sigue siendo él.¡ Que
mejor elogio!. Pintura particularísima la suya que no admite términos medios. O
encanta o aborrece. Afortunadamente me cuento entre los admiradores de éste
tipo de pintura. JAUME ARENAS añade a su obra, ya clásica en él, los tonos
amarillentos y rosáceos, largo tiempo ausentes de sus acuarelas, mientras que
JORDI ARENAS parece haber detenido el reloj con una pintura que domina, y aún
siendo bella, parece fuera de lugar. BOIX nos muestra un tema de gladiolos de
gran belleza. Para su estilo de pintura la problemática floral la encuentro interesantísima
debido a las posibilidades de intercombinaciones colorísticas de gran efecto.
G.CALABIA sigue con su pintura a la encaústica, genial en su construcción
pero de difícil lucimiento que logra con la escultura que presentó en audaz y
equilibrado tarta miento de líneas y volúmenes, a mi gusto, una de las mejores
de la sala. COSTA sigue en su proyección
meteórica hacia la cumbre. Tema urbano de gran fuerza pictórica que el acredita
ya como elemento de ésta “élite” de consagrados. M.CUSACHS i M.CUYÀS mantienen su línea pero
decepcionan, en especial el primero, ante una obra poco acorde con su gran
calidad. S.ESQUERRA me ha complacido con su gran tema acuarelístico , muy bien
resuelto, mientras que de SANTIAGO ESTRANY sigo añorando sus temas urbanos geométricamente
construidos y que son su sello.
Sigue, con el barroquismo popular y florido de sus “ex votos” y nadala,
HOIT, mientras que P:MAÑÉ mantiene una pintura muy difícil de asimilar pero en
la que aceptado eljuego que nos presenta el autor, alcanza en su verosimilitud,
gran interés. A.OPISSO pese a la frialdadde su obra sigue siendo el gran
dibujante que todos conocemos, pero ¿po qué no un tema de circo en los que él
sigue siendo maestro indiscutible?.
PARÉS, con sus ceras, amplios cromatismos interaccionados, dá fuerza a
una obra que debe evolucionar pués dolería su estancamiento. J.PUIGGALÍ
discreto siempre puede servir de contrapunto al bello intimismo femenino de
EMÍLIA de TORRES , en su gran momento, mientras que TERRI con sus “cromets”
mantiene lo que sólo él sabe crear.
III.- EN ASCENSIÓN
Positivísima actuación de ésta pléyade de jóvenes, en muchos casos
desconocidos, no solo para el público en general, sino también para el crítico,
que dan tono y valor, elevando la muestra a límites inesperados de calidad.
Así tenemos a BENÍTEZ con su polémico tema, de mucha “guerra”. T.BOIX en
una mezcla de clasicismo e intencionalidad logra dos obras que merecen nuestro
elogio.No así JUANJO CARDENAL que siempre megustó i que en esta ocasión lo
hallo algo bajo de tono. CASAS PEÑA sigue en su rápido ascenso logrando, pese a
las pequeñas dimensionesde su obra, una gran expresión plástica. Al igual que
COLOMER con su grácil escultura muy conjugada de masas y volúmenes. CODINA y COMABELLA en un contrapunto
sensacional. Uno juega con un cromatismo diluido, en obra que llegó muy arriba
en el premio de “La cripta d’Art”, mientra que el otro actua con una fuerza
telúrica de muy buen ver. Por otra parte CONTRERAS y NOGUERA no parecen
encontrar una línea adecuada, klínea que ha conseguido J.CUYÀS que es quizás la
revelación de este Sant Lluc 75. Su escultura es indicativa del espíritu que
emana del autor y que se muestra en sus dos obras en afán de búsqueda de
razones estéticas en el difícil campo de la introspección.
JORDÀ i VIADA parecen recuperados de éste ostracismo al que parecían condenados.
Gran momento en especial de VIADA aquién
últimamente le hemos visto excelente y
del que esperamos una próxima exposición
individual, como también la deseamos de J.NOVELLAS, junto con ALCOY las
dos estrellas de la colectiva. Su manera peculiar de entender la pintura, al
fuerza expresiva de sus imágenes, junto con una técnica adecuada en todo
momento a la obra hacen de él un artista que sin temor a equivocarnos ha
alcanzado ya el peldaño anterior al estrellato.
SAFONT TRIA sigue en su línes
clásica en contraste con la vivacidad de PAL, aspecto que parece a veces perder
VILARRUPLA , pese a la belleza y estimable calidad de su tema a base de
cromática térrea, mucho mejor que su tema de mar. YAGO VILAMANYÀ no alcanza en su escultura,
muy personal, su categoría otras veces demostrada y URGELLÉS nos presenta un
busto de niño de gran estilo dentro de su concepción serena, y ROC TERRICABRES
no parece aún estar en posesión de la vivacidad de su progenitor, pero
apuntando hacia un objetivo concreto.
IV.- LOS DEMÁS
Aunque a primera vista pudiera parecer peyorativo éste titular, no és ésta
mi intención. Ante la obra de setenta autores , intentar un ligero análisis de
todos ellos implica una división necesaria. Al estar formada la exposición por
estos núcleos bien definidos, de artistas consagrados y de juventud pujante,
queda un hueco formado por el resto de los participantes que en cierto modo
ayudan a aglutinar toda la colectiva y hace que esta en realidad quede muy
fraguada y no se rompa ni decaiga su interés visual, excepto claro está en una
decena de obras de calidad , digamos inferior, por no emplear otro adjetivo,
pero que reconozco son fruto de una buena voluntad, aun que no creo que la
buena voluntad en Arte siga para algo.
Desde el aficionado ue no sabemos que pinta en esta colectiva, hasta aquel
que está iniciando con sencillez su camino profesional y sigue en su búsqueda
personal, com E:DOMÍNGUEZ, E.LÓPEZ o J.MARTÍNEZ cuya pintura
podrá llegar a interesar quizás en un espacio breve. Destacaré así las
composiciones geométricas de J.NOGUERAS,
el clasicismo bien realizado en la “marina" de F.ORTIZ o las adecuadas pinceladas
de color de J.PACHECO.
Por ello creo que como apunté en mi nota inicial, el Sant Lluc además de
aglutinar un compañerismo sirve de punto de comparación, de auto-análisis, de
reflexión ante el “como” y el “por qué” de tal o cual manera de expresarse
plásticamente. O por lo menos debe servir para esto, para una noble emulación en la cual cada
participante presente lo mejor de su producción, como la honrz, prez y tarjeta
de presentación de lo que sabe hacer.
De ahí que la idea me parezca muy buena. És más soy de los que creen que
otra colectiva quizás más depurada, debería presentarse en otra fecha , por
ejemplo “la Fira”. Y de estas dos magnas exposiciones, no dudo que saldrían seguramente
más de una sorpresa.
Mi felicitación a los organizadores y a los que han contribuido a la
belleza de esta edición de 1975 que seguramente será recordada como la mejor.
PIC II
Aquest és l’inici , en el que m’esparvero
de la redacció i llenguatge però que he volgut recuperar amb el detall si més
no curiós, de veure les opinions que em van merèixer certs artistes que ocupen
o han ocupat lloc de privilegi en aquests quaranta anys.
I ara a esperar el capítol final
per acabar definitivament quaranta anys de crítica periodística local.